viernes, 19 de octubre de 2012


MTRA. MONTSERRAT ESPINOSA SANTAMARÍA
HERNÁNDEZ LAIJA GUADALUPE PILAR
ENSAYO “LA FAMILIA EN LA ACTUALIDAD, AVANCES O RETROCESOS”
GRUPO: 105109


El pasado 3 de octubre la "coach" del "reality" "La voz... México" anunció mediante un comunicado que su matrimonio de dos años con el ex beisbolista mexicano Esteban Loaiza llegaba a su fin y que un día antes había presentado en la corte de Los Ángeles la demanda de divorcio por "diferencias irreconciliables" (El Universal, 2012).
Qué cosas, si  nuestros abuelos escucharán que el divorcio se solicita por diferencias irreconciliables, creo que se volverían morir, cuantas cosas han cambiado a través de los años, la pregunta sería ¿en dónde quedo el amor, en dónde los pactos, en dónde tu tiempo, en dónde el concepto de familia (..)?
En la actualidad la idea de divorcio produce  el miedo sobre el ocaso de la familia, en las encuestas de opinión y en las de investigación, aparece una y otra vez el deseo de los jóvenes de formar sus propias familias y el de los adultos de mantenerse viviendo en familia.
Todo esto es controversial, porque el ser humano quiere crear sus reglas, sus contratos, la ruptura de estos, etc., y por otro lado, tratan de rescatar la idea de la familia, lo vemos en las revistas, programa de espectáculos, telenovelas y demás, y empiezan a ser conferencias, libros, y demás.
            De dónde surge esta dualidad, si recordamos un poco con la familia romana se instituye el contrato matrimonial, era algo importante, no considerando que era muy patriarcales, sino en el ámbito que marco “el contrato”; podremos mencionar los diferentes tipos de familias pero debemos tomar conciencia del momento histórico-social en el que estamos viviendo ya que  lo cierto es que se han descentrado nuestros marcos de referencia (nuestros padres, abuelos).
 Las dinámicas familiares  se han ido transformando y esto nos obliga a cuestionarnos: ¿qué le espera a lo que hasta ahora hemos llamado familia? ¿Cuáles son las predicciones que podemos hacer sobre su fragilidad, o resistencia?.
Ricardo Montoro  (2004) señalaba acertadamente por qué la familia es tan vital para una sociedad y para el ser humano, y dijo al respecto, que por la simple economía de recursos, ya que ninguna otra instancia ordena de manera tan “natural”, procesos tan elementales y complejos para la reproducción social, como lo son la reproducción biológica, la socialización de los más jóvenes, la reproducción económica básica, las relaciones intergeneracionales, la regulación y canalización de los sentimientos y la regulación de la conducta sexual. Contrastando esta opinión podemos ver familia  “Es un conjunto de personas que conviven bajo el mismo techo, organizadas en roles fijos (padre, madre, hermanos, etc.) con vínculos consanguíneos o no, con un modo de existencia económico y social comunes, con sentimientos afectivos que los unen y aglutinan.
¿Aquí se diría entonces, que ya no es suficiente con dar cobijo, protección sustento económico, educación, filiación, sino que también en la actualidad se tiene que cumplir con otras expectativas como sociedad?.
¡Claro! gracias a que gran parte de la vida social está organizada desde la vida familiar, en la actualidad las dinámicas familiares se han transformado, aquí no tiene nada que ver si es bueno o no, simplemente se ha evolucionado y reconstruyendo según los tiempos y los modos.
No quiere decir que no sea importante en la actualidad la familia, sino que se ha complementando y conjuntando con la sociedad como por ejemplo podemos saber “quién es hijo de quién”; es decir, podemos ordenar la reproducción, algo tan aparentemente sencillo pero que nos ha orillado a inventarnos un sistema de clasificación que indica las líneas de descendencia y ascendencia
Otra tarea fundamental de la familia es la de educadora y formadora de los niños. La socialización en las formas de vida reconocidas por la comunidad es la base de la reproducción social. Si bien el Estado colabora a través de la educación formal y los medios de comunicación hacen lo suyo afectando en las maneras de entender el mundo en procesos acumulativos y a largo plazo (Martín López, 2000), es en el seno de la familia donde el niño construye sus primeros referentes, los que le servirán para asimilar y acomodar todos los estímulos que a lo largo de su vida recibe.
En ningún otro espacio social se dan las luchas de poder y negociación generacionales o de género como en la familia. Es en familia donde aprendemos los roles de hombres y mujeres, pero también es el espacio donde se ordenan las relaciones intergeneracionales.
La familia no solo se concibe desde lo que pueden brindarse uno a otro dentro del grupo, sino ahora también se toma en cuenta que es parte de una sociedad y como tal debe de funcionar con ciertos parámetros, que ha estado llevando a ésta generación a ir en busca primeramente de otras opciones de vida.
Por otra parte, la familia se convierte en el campo de batalla entre lo viejo y lo nuevo, por lo mismo, en familia se resguarda lo bueno de lo viejo y se renuevan las ideas; es decir, se negocian formas de conducta más operativas para el mundo moderno.
Los cambios de la modernidad, implican que al darse la ruptura con el modelo basado en la tradición, se ha obligado al individuo (por lo tanto a la familia) a fundamentarse en sí mismo, es decir, antes, la tradición implicaba que al casarte lo “lógico” era la llegada de los hijos y que si por algún motivo había problemas, rezabas para que las cosas mejoraran; en ese acto delegabas a Dios la búsqueda de soluciones y quedabas cobijado en su sabiduría.
Ahora, la sola percepción de tener un abanico de posibilidades dispuestas y factibles de ser elegidas por el individuo, deviene en una realidad caótica porque lo que se hace evidente es la responsabilidad del que elige, los errores u omisiones son referidos directamente al sujeto y no a una divinidad o entidad externa.
Cabe mencionar, que de acuerdo a lo anterior, no hay retrocesos, solo que las mejoras o cambios de dan por la evolución de la vida misma.

“Sólo hay un lugar donde la más cruel de las agresiones, donde el más odioso de los insultos no conduce a una ruptura definitiva; la familia (...) las redes familiares introducen, en suma, a muchos retos” (González Requena, 1992: 123).


















BIBLIOGRAFIA:
Montoro Romero, R. (2004, 24 de febrero). La familia en su evolución hacia el siglo XXI. Paper presented at the II Congreso la familia en el siglo XXI, Madrid.

1 comentario:

  1. Pily, quitale el subrayado y que la primera línea sea el título del artículo para que así se vea en la entrada.

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